Precariedad migratoria: ¿Una pesadilla de la 4a Transformación?

Precariedad migratoria: ¿Una pesadilla de la 4a Transformación?

Por Jaime Montejo de la Brigada Callejera de Apoyo a la Mujer, “Elisa Martínez”, A.C.

Agencia de Noticias Independiente Noti-Calle, Tapachula, Chiapas, 16 de abril de 2019.

La nueva política migratoria del gobierno mexicano, de impulsar en la práctica El Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular, ha permitido la regularización de miles de migrantes que ingresan por la frontera sur de Chiapas, procedentes de Centroamérica, Cuba y otras regiones del mundo.

Sin embargo, la migración irregular ha rebasado por mucho a las autoridades de todos los niveles, cuya respuesta no se ve por ningún lado, salvo las acciones calificadas como buenas o malas del Instituto Nacional de Migración (INAMI).

Si bien es cierto que la ayuda humanitaria a quienes han decidido migrar de una forma regular, es precaria, al menos cuentan con hospedaje, alimentación y atención médica.

Ahora, quienes ingresan de forma irregular en caravanas, son vigilados por elementos de la policía federal y últimamente por elementos de la policía municipal, se ve la presencia de vehículos de Protección Civil y alguna ambulancia de la Cruz Roja.

Los grupos que ofrecían alimentos a migrantes en el Parque Central “Miguel Hidalgo”, escasean y hay caravanas que no logran ver a un solo grupo humano ofreciendo este tipo de apoyo.

Hay oferta de pruebas rápidas de VIH y sífilis, por parte de la Brigada Callejera, de forma irregular como la calidad migratoria de quienes forman parte del éxodo centroamericano, cubano, africano y asiático.

No hay voluntad política de los tres niveles de gobierno para ofrecer garantías mínimas de seguridad, a quienes decidieron migrar de forma no regular, aunque sí ordenada, con medidas de seguridad internas, con reglas básicas sobre la basura, uso de sanitarios y respeto a la población tapachulteca y a quienes integran dichas caravanas.

La única luz en medio de tanta oscuridad, fue la reunión realizada la semana pasada en el auditorio de la delegada federal del INAMI, Carmen Yadira de los Santos Robledo, donde se lograron acuerdos mínimos de colaboración inter-sectorial en materia de protección de la salud de la población migrante que realiza trámites de regularización en Mapastepec, Sochiate y quienes pernoctan una o varias noches en el Parque Central “Miguel Hidalgo” y Parque “Bicentenario” de Tapachula, Chiapas.

No hay estrategias de prevención de VIH e ITS, tampoco insumos para la salud como condones y lubricantes solubles al agua, que hasta el año pasado se podían proveer con recursos de Censida, a través de organizaciones de la sociedad civil (OSC) como la nuestra.

El fantasma del desabasto de medicamento antirretroviraL (ARV), amenaza con afectar a migrantes regulares o irregulares con VIH y a todas las personas que viven con VIH en la ciudad y sus alrededores.

No hay una estrategia de prevención de la trata de personas dirigida de manera ordenada y segura a migrantes regulares o irregulares.

Las condiciones de abandono de las personas que integran las caravanas, es un aliciente para la trata de personas, el secuestro de migrantes, los feminicidios y asesinatos de migrantes, así como para la xenofobia y el racismo.

En conclusión, una nueva política migratoria rige las decisiones del servicio público federal, en una sola línea de mando unipersonal, que impide atender de manera humanitaria a las oleadas del éxodo migratorio centroamericano, cubano y extra-continental.

¿Migración regular? Sólo acoge a una minoría de migrantes.

¿Migración ordenada? Prácticamente engloba a quienes solicitan documentos migratorios y a quienes deciden no hacerlo. Sin embargo, los Estados que signaron el Pacto Mundial, entienden por ordenada, la presencia de corporaciones policiacas como filtro de la migración y en pocos días la presencia de una Guardia Nacional militarizada.

¿Migración segura? Ni siquiera de quienes han tramitado documentos migratorios, ya que no cuentan con la información mínima para prevenir el delito, la trata de personas, secuestro de migrantes, violaciones sexuales, feminicidios ni asesinatos.

Para algunas personas migrantes, que recorrimos los caminos de México, “indocumentados” durante muchos años, la migración segura es la que te permite hacer realidad tus sueños de un mañana donde puedas trabajar, estudiar y sacar adelante a tu familia.

Lo que estamos viviendo en este momento en la frontera del sureste mexicano, es una migración abandona a su suerte, con grandes promesas presidenciales de empleo, visas para todos y futuro feliz.