Trabajador@s sexuales marchando este 1 de mayo.
Por Ricardo Guerrero de Noti-Calle
Este Primero de mayo se dieron cita alrededor de las nueve y media de la mañana trabajador@s sexuales en las inmediaciones de la oficina de “Brigada Callejera de Apoyo a la Mujer EM AC” para marchar con por las calles de corregidora, circunvalación, San Pablo, Izazaga, 20 de noviembre y finalmente el arribo al Zócalo capitalino.
Dentro del oficio hay una recomendación: “La que no enseña no vende”. Sin embargo, estos cuerpos que para llevar el pan a la casa muestran lo más de piel a las miradas de los transeúntes, este viernes, se cubrieron para no ser reconocidas. Mari, voluntaria de la AC, en vigía en la puerta del 115 de corregidora, esperando el arribo de las trabajadoras sexuales del área de la Merced-Calendaría para compartirles un cubre-bocas y un gorro de fieltra azul, como símbolo de que han sido asesoradas para ser promotoras de salud.
Los que también llegaron temprano fueron las autoridades de “protección civil”, representadas por cuatro sujetos de diferentes edades y una mujer de alrededor de cincuenta años. Preguntaron sobre el recorrido, los puntos del pliego petitorio, si había alguna propuesta para pedir una audiencia al jefe de gobierno del Distrito Federal.
La mayoría en ropa deportiva, de los colores muy diversos. Muchas de ellas llegaban con la prisa, la frente llena de pequeñas gotas saladas creyendo que ya era tarde. Al ver el grupo de mujeres reunidas el pasillo se tranquilizaban. Todas pedían su cubre-bocas. Alrededor de las 9:50 el grupo tomó su primera calle, corregidora. La presidenta de Brigada Callejera Elvira Madrid con altavoz en mano animó el recorrido y la lucha, -Creyeron que este año no lo haríamos, pero aquí estamos, el primero de mayo el “oficio más antiguo del mundo” que, sin embargo, no era reconocido sino hasta el año pasado-.
Ante consignas como “Respeto total al trabajo sexual” se expandieron a lo ancho de tres carriles de Circunvalación. Los reclamos de ellas, las miradas absortas de los transeúntes en las aceras se mesclaban a cada paso. Las que marchaban exhortaban a sus compañeras, que estaban paradas a lo largo de esta avenida y las miraban pasar, que se unieran. –Al igual que nosotras ustedes también deben de luchar por este trabajo que es de todas- les grito una vos clara y joven y anónima del grupo de cerca de doscientas personas que protestaban.
Los claxonazos de los automovilistas no se dejaban esperar. Las miradas de los cargadores, de los vendedores y vendedoras se detenían un momento para mirarl@s pasar, tratar de reconocer algun@ o para admirarse que están dispuest@s a dignificar un oficio que esta devaluado históricamente.
Otra de las consignas recurrentes fue la de “derechos laborales a las trabajadoras sexuales”, esto en el contexto después de ganar un amparo y lograr el reconocimiento dentro de los estatutos de trabajadores no asalariados.
La marcha se detuvo sobre la avenida 20 de noviembre. En este lugar en vos de Krizna se leyó el comunicado donde se exhorta al gobierno del Distrito Federal la elaboración de un protocolo para diferenciación entre trabajo sexual y trata de personas, que asuma el compromiso para el acceso de l@s trabajador@s sexuales de la vía pública a la credencial de no asalariado y sea respetada por hoteleros y “representantes”, se derogue la fracción VII del artículo 24 de la Ley de Cultura Cívica del D.F., que se deje de criminalizar el baile erótico como ocurre actualmente en Chiapas, Coahuila, Estado de México y Distrito Federal.
La peticiones de orden nacional se denunció el cierre de bares el Chiapas a causa de no contar con la licencia respectiva, que ya fue pagada y no ha sido entregada por la Secretaria de Salud del estado, que el gobierno de Puebla deje de perseguir a trabajadoras sexuales y dejen de clausurar los lugares donde se labora.
El comunicado cierra con la exigencia de “Alto a los crímenes de odio da trabajadoras sexuales y transgénero en toda la república”, “Respeto total al trabajo sexual”, “Por el derecho a trabajar en el sexo siendo migrantes”, “Trabajo sexual, no es trata de personas”.
Continuando con el mitin Elvira tomó la palabra para hacer reclamos a aquellas personas que dicen que las van a y sólo llevan recursos para sus propios intereses y recordó la muerte de muchas trabajadoras sexuales mencionando el caso de Cancún donde se les prendió fuego a mujeres por parte del crimen organizado y, hasta el momento, no hay culpables detenidos. Pidió un minuto de silencio por las compañeras caídas. En este lapso de tiempo se vieron corren en más de una mejilla una pequeña gota para el mar del recuerdo.
Por parte de Rosa Ícela al tomar el megáfono recordó la victoria ganada con el reconocimiento legal del trabajo sexual y exigió a las autoridades la inclusión, ahora ya obligatoria, de los derechos laborales a los que tienen derecho por el status de no asalariadas.
Las trabajad@s sexuales se fueron retirando poco a poco, sin antes hacer que resonara con su eco la esquina de 20 de noviembre y el zócalo a la voz de consignas propias de su quehacer laboral:
“Respeto total al trabajo sexual”
“Trabajo sexual, no es trata de personas”
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