DÍA INTERNACIONAL DEL TRABAJO SEXUAL
Francisco Lagunes
El Día Internacional de la Trabajadora Sexual es una fecha conmemorativa que recuerda a la discriminación de las trabajadoras sexuales, de su vida, y de sus condiciones de trabajo.
En el comienzo de década de 1970, los organismos que vigilaban el cumplimiento de la ley en Francia mantenían a las prostitutas bajo constante presión.
Las represalias de la policía obligaron a las mujeres a trabajar más en secreto. Como resultado, la protección por parte del público se fue desapareciendo y llevó a más violencia contra las adolescentes.
Después del homicidio de dos de ellas y la falta de voluntad del gobierno para mejorar la situación de las “prostitutas”, el punto de partida del Día Internacional de la Trabajadora Sexual es en memoria del 11 de noviembre de 1975, en el que más de 100 trabajadoras ocuparon la Iglesia de Saint-Nizier de Lyon, Francia, con el fin de llamar la atención por la situación que estaban viviendo, declarándose en huelga. Después de ocho días de la huelga la iglesia fue allanada por la policía.
Este suceso es considerado como el punto de partida del movimiento y de los derechos de las trabajadoras sexuales.
Simone De Beauvoir reconoció en 1972 solidarizarse con las otras mujeres en vez de su separación de ellas. Romper los mecanismos de control y vigilancia hacia las profesionales del sexo es un objetivo que concierne a todas con motivo de la explotación del sistema.
Reconocer y respetar los derechos de las trabajadoras sexuales ha sido el primer paso para la cancelación del estigma impreso en sus cuerpos y sobre todo para no volver a imprimirlo.
Desde esa fecha memorable del 2 de junio las condiciones y derechos de las personas que practican el comercio sexual ha avanzado mucho.
Después de la huelga en Francia el 11 de noviembre, se cambió y el día internacional se conmemora anualmente desde 1976 el 2 de junio.
Gracias al esfuerzo y lucha de Brigada Callejera, el trabajo sexual cuenta ya con un reconocimiento como actividad laboral y aún que la situación es complicada y conlleva una elevada vulnerabilidad social sin acceso a servicios de salud, vivienda, etcétera, continuemos solidarias y unidas para que la voz de BRIGADA CALLEJERA DE APOYO A LA MUJER “ELISA MARTINEZ”, resuene en toda la República y se respeten los derechos humanos y laborales de las trabajadoras sexuales.
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