Toca escuchar y poner atención

Toca escuchar y poner atención

A las compañeras trabajadoras sexuales del mundo.
A los pueblos que sigue en resistencia en sus barrios y comunidades.
A nuestros hermanos zapatistas que siguen en pie de lucha en todos los caracoles de nuestro mundo.
A todas las mujeres que a diario luchan por sobrevivir ante la violencia sistémica machista y patriarcal.
A los hermanos que siguen organizándose desde sus trincheras para frenar esta guerra en contra de la vida.
A los medios libres que son responsables y éticos con las voces que buscamos frenar el abuso y la violencia.

Desde Brigada Callejera de Apoyo a la Mujer, E.M. A.C., nos toca escuchar y poner atención a las voces que se reunieron para compartir su palabra y sus experiencias en el Encuentros Internacionales de Resistencias y Rebeldías convocado por nuestros hermanos zapatistas que siguen hasta hoy declarando su fuerza, ante la guerra del gobierno mexicano en contra de todos aquellos que estemos defendiendo la vida, la salud, la educación, la autonomía, la forma natural de la resistencia de comunidades, barrios y grupos marginados.
Aquí en nuestros espacios comunitarios “Jaime Montejo” y “Ernesto Guevara De la Serna” a diario escuchamos las voces de miles de mujeres trabajadoras sexuales, comunidad diversa, familias desplazadas y en tránsito, que narran las formas reales de los gobiernos que buscan matar, desaparecer, humillar, ganar votos, dinero, silencios, ante ello siempre estamos rebasadas para ser imaginativas y crear acciones que permitan la voz y la reflexione entre nosotras, porque creemos en la Autonomía, en la organización entre mujeres para resguardar los conocimientos ancestrales que frenan el consumo de medicamentos a las grandes farmacéuticas que tienen como objetivo ventas a grandes escalas de productos que dañan de manera progresiva el sistema inmunológicos de las personas, la búsqueda de formas de autocuidado es una de las luchas constantes desde nuestra trinchera, teniendo como resultado la persecución histórica, al ser la primer organización de la sociedad civil que trajimos a México el condón femenino poco antes del 2000, se llegaron a encontrar un solo condón femenino hasta en 150 pesos, lo cual era incosteable para muchas mujeres, incluyendo a aquellas que se dedican al trabajo sexual y que necesitan protegerse.
El poder incluir este producto en el cuadro básico, recordó, fue una tarea que les llevó al menos dos años, empezando por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (hoy Ciudad de México) y después, y posteriormente se introdujo de manera generalizada en el país.
En ese momento, con la posibilidad de incluir el condón femenino en el cuadro básico de medicamentos, se logró bajar su precio en el mercado para la compra del Sector Salud de 150 a sólo seis pesos, debido a la alta demanda que se generó en su momento y a la importación de lotes de buena calidad.

En ese entonces hicimos una campaña intensa, desde la sociedad civil, especialmente desde Brigada Callejera de Apoyo a la Mujer, E.M. A.C., para promover el uso de los condones femeninos, que incluían hasta 50 ferias del condón por año.
Cuando se logró que, en el cuadro básico de salud, se incluyera este condón, hubo empresas privadas que empezaron a interesarse por la distribución como un negocio, quitándole a la sociedad civil la posibilidad de seguir consiguiendo estos productos a bajo costo y vendiéndolos ellos como intermediarios, subiendo el precio incluso a 80 pesos en el mercado.
La primera crisis de condones gratuitos la tuvimos cuando el CONASIDA decide disminuir hasta el 10% la dotación mensual autorizada a Brigada Callejera, a mediados de 1995, por cuestionar el control sanitario forzado que se realizaba entre trabajadoras sexuales, donde se violaban sus derechos y su dignidad humana.
Dicho estudio comprendió la selección de la marca y su diseño, a través de grupos focales en la zona de la Merced; su registro ante la Secretaría de Comercio y Fomento Industrial (SECOFI) y la Secretaría de Salud (SSA), para que se evaluara si cumplía con las disposiciones de la Norma Oficial Mexicana que establece las especificaciones de los condones de hule látex (NOM-016-SSA-1993).
Sin embargo, los ataques a nuestro programa de mercadeo social surgieron por parte de funcionarias del CONASIDA – CENSIDA de la Secretaría de Salud y de las ONG con trabajo en sida, que sentían que un grupo de recién aparecidas y aparecidos, no tenían porque, haber estructurado un proyecto de tal dimensión, sin su asesoría o consentimiento.
Fue entonces cuando DKT y PSI, entraron al mercado de condones para desaparecernos, ya que mientras esas dos trasnacionales contaban con recursos de la USAID y del gobierno mexicano, Brigada Callejera sólo contaba con el trabajo hormiga y el compromiso con la construcción de “un mundo donde quepan muchos mundos”.
Hemos visto por años la forma en como el poder busca quedarse con proyectos y con ideas de grupos pequeños que buscan autonomía, el tema de salud es la defensa por la vida.
Desde la pandemia por el COVID-19, la forma de operar del gobierno mexicano fue otro gran ejemplo de abuso, violaciones a derechos humanos, en el que los funcionarios públicos ocuparon como trampolín político como Hugo López-Gatell al encabezar las medidas gubernamentales para enfrentar la pandemia de COVID-19. Que en realidad fue una pantalla armada para que la sociedad civil no se escuchara con las denuncias que lanzábamos a diario, al ver a nuestra gente morir, porque los muertos en la pandemia los pusimos los pobres. Nosotras denunciamos como se duplico el trabajo sexual en la Ciudad de México y en los 28 estados de la República Mexicana, meses antes del repunte en México por COVID-19, fuimos preventivas y montamos de inmediato un
comedor comunitario saliendo del metro revolución, para apoyar a las cientos de compañeras que ya tenían los síntomas del COVID-19 y no tenían fuerzas para trabajar, llevábamos medicamentos, ya que aunque el mal gobierno en turno criminalice la entrega de medicamentos, el no hacerlo sería una omisión ante un derecho humano que es la vida y la calidad de la misma, ayudamos a cientos de ellas que en un mes se fueron recuperando, sin ir a trabajar solo con los autocuidados que son de calidad aun en la pobreza y en la calle cuando tenemos redes de apoyo que nos permiten sentirnos apapachadas y cuidadas. Estuvimos en la calle diario en la Merced, en Tlalpan, en Revolución en recorridos nocturnos entre promotoras de salud, que hasta hoy son 1,500 en CDMX, que siguen el proyecto de autogestión y enfrentamiento contra la gente como hoteleros, policía, funcionarios públicos corruptos, delincuencia, todas salíamos para ayudar a las compañeras que ya en el despunte de la pandemia, fue muy violento ver las calles vacías y las miles de personas que sobreviven la calle, los gobiernos corrían a las gente de los deportivos, de las plazas, de las calles con el grito a grabadora: “quédate en casa”…
Brigada Callejera no se resguardo en ningún momento, dimos la batalla con todas nuestras fuerzas, tiempo y rabia ante lo que observábamos cuando llevábamos a las compañeras a los hospitales, cuando observábamos la forma de operar del gobierno de la Ciudad de México en voz de funcionarios públicos nefastos que solo jugaron con la vida y necesidad de miles de compañeras trabajadoras sexuales, seguimos exigiendo la destitución de una pésima funcionaria pública Ixchel Iralia Anguiano Castrejón, Coordinadora Jurídica y Normativa, perteneciente a la Sub secretaria de programas de Alcaldías y Reordenamiento de la vía pública (SSPARVP), quien solo entrego apoyos de tarjeta de ayuda a trabajo sexual, a vendedores ambulantes y grupos de madrotas y padrotes en vía pública; Marco Antonio Temístocles Villanueva Ramos, quien solo ha usado las luchas de las poblaciones diversas, trabajo sexual, como un poder político para no salir de la escena cobijándose en procesos históricos que no conoce pero que busca siempre escuderas que le cuiden la espalda con favores personales a sus grupos teniendo a las compañeras sumisas ante listas, despensas, citas, camionetas que siempre son para su interés exclusivamente personal, mitin, reuniones, para aplaudir como focas, burlándose de la inteligencia de las compañeras, ahora desde la atención a personas en movilidad le veremos jugar desde otro banquillo como utilizara a esta población ahora; el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (COPRED), Geraldina González de la Vega, quien no tenía el radar de trabajo sexual pero al conocerlo solo lo vio como una posibilidad de mantener su posición política, al estar con los funcionarios públicos antes mencionados de la mano de mujeres oportunistas que han buscado desde hace ocho años aproximadamente seguir utilizando a las compañeras pidiendo datos nobles, exigiendo números telefónicos, comprobantes de domicilio, credenciales de elector para campañas electorales de Marco Antonio Temístocles Villanueva Ramos, que exige le llevaran cientos de copias de credenciales de elector, así como la señora María Clemente García Moreno, exigiendo firmas para sus pésimas iniciativas de ley.
En todo su camino desde el COVID-19, la titular de COPRED no levantó una sola queja ni se pronunció por todos actos de violación a derechos humanos, discriminación a las compañeras trabajadoras sexuales, pero ahora le vemos hablando del tema y tratando de desdibujar la cantidad de mujeres trabajadoras sexuales que hoy están en la ciudad, ante ello y en la búsqueda de aplaudir el discurso del gobierno creo una encuesta para hablar de menos del 1 por ciento del trabajo sexual con encuestas que para su creación entregó a grupo de mujeres apoyos económicos para justificar su encuesta que no representa los abusos a los que son sometidas las compañeras, se mantuvo jugando con la figura de Asamblea Consultiva, fue elaborando un discurso para apagar la búsqueda de derechos urgentes del trabajo sexual.
En Brigada Callejera no olvidamos, documentamos y avanzamos para dar atención digna y construcción de autonomía para que las propias compañeras tengan las herramientas de la lucha y la dignidad.
En el proceso de la pandemia vimos con impotencia y dejando todas nuestra energía en la calle como iban muriendo las compañeras por ser pobres, porque el gobierno no habilito espacios dignos de resguardo y cuidado, para la población, no llevo comedores comunitarios a la calle, no hizo absolutamente nada para la población más desprotegida por el contrario, exigía documentos, salían a dar entrevistas con un par de fotografías dando un plato de comida sin estar en calle, le exigían a la población tener un teléfono inteligente, mantenían reuniones por plataformas digitales para hablar de la pandemia, de los muertos desde la comodidad de su casa, porque todos los mencionados tienen casa, tienen recursos y hoy siguen en puestos públicos aunque su desempeño es despreciable ante las necesidades de la población. Cuentan con seguridad social privada, Jaime Montejo y miles de personas no tenían atención médica ni contaban con un seguro médico, ni con una cuenta bancaria para resolver situaciones difíciles, Jaime murió por estar peregrinando hospital tras hospital donde nadie absolutamente nadie ayudo, porque solo entre nosotras que sabemos el dolor de las necesidades sabemos lo urgente de una ayuda inmediata, Jaime se contagió de COVID, entregando comida a las compañeras en la calle, platicando con los vecinos que corrieron los caseros, con las vecinas que se quedaron sin empleo al cierre de los hotel, bares, cantinas y restaurantes.
¿Quién estaba en la calle?
¿Quién de los funcionarios públicos salió con un proyecto para resolver, aportar? Nadie.
Pero a la menor provocación para una actividad que exigíamos desde la calle para que resolvieran, se lanzaban con medios de comunicación, para que su imagen se difundiera como los sensibles y como funcionarios comprometidos.
Los conocemos, les sabemos sus mentiras y les documentamos sus abusos y violencias al abusar de las necesidades de las trabajadoras sexuales.
La forma en la que actúan desde la figura de Secretaría de Inclusión y Bienestar Social (SIBISO); en voz de la Coordinador de Diversidad como Ulises Pineda Miranda jefe de la Unidad Departamental de atención a la Diversidad, que utiliza su puesto político como una herramienta de cambio por y entre amistades entre las compañeras y quienes le soliciten atención solo desde su vínculo personal, siendo entonces discrecional los servicios volviéndose solo recursos personales para sus amigas, amigues para verlo como moneda de cambio. Podríamos seguir en ejemplos de atención nefasta que lejos de ayudar a las compañeras les enseña la forma pueril y servicial que realiza el poder desde cualquiera de sus trincheras, diputado, funcionario, titular, entre miles de cargos más que solo sirven para robar el dinero del pueblo lejos de resolver las necesidades.

El Estado ha matado a miles de las nuestras y no olvidamos, siempre con voces de distintos colores nos dicen que las cosas son distintas, que las situaciones en el país son cada vez mejor, pero nosotras sabemos las verdades, las muertes, los abusos.
Observamos como nos persiguen por querer organizarnos, como nos piden miles de requisitos por ayudar, pero a las grandes empresas y a los amigos les dejan que operen en el país, con total impunidad.
Aunque se les den más y más tarjetas al pueblo de México, el pueblo observa en sus barrios, en sus comunidades las otras realidades que cada día llegan a las puertas de nuestros hogares, desaparecidas, muertas, violencias, impunidad, robos, narcotráfico, desaparición, delitos elaborados a cada luchador social que defiende al agua, los montes, Manantiales, maderas, sus tierras, sus pueblos, la calle.
No vamos a callar lo que hemos visto, escuchado y documentado, no vamos a frenar la forma estructural de Brigada Callejera para estar en relación con las compañeras para seguir construyendo lazos de Digna Rabia, donde la búsqueda por una forma de vivir digna ante un capital aplastante que manda el modelo económico neoliberal y globalizado solo muestra la explotación laboral, la trata de personas, explotación sexual, desaparición forzada, feminicidios, transfeminicidios, homicidios dolosos, hostigamiento a luchadores sociales.
No vamos a frenar la forma de relacionarnos con nuestros hermanos desplazados que salen de sus países, no porque tengan que elegir en otra forma de vida sino porque no hay otra opción en sus países de origen, la violencia es global, la búsqueda por la explotación de los medios naturales es global, las grandes empresas y los gobiernos de izquierda y de derecha atienden intereses que no son las urgencias de las sociedades, son las necesidades de las estructuras de poder.
En Brigada hemos atendido, solo en el 2024, en nuestros dos centros comunitarios, a más de 22 mil consultas, de las cuales hasta un 60 por ciento son mujeres migrantes y sus hijes. La trata de personas incremento hasta en un 30% debido al aumento de personas desplazadas de sus países de origen.
Somos zapatistas, aprendimos de nuestras hermanas en Chiapas, y cada una de nosotras tenemos historias particulares donde en nuestra juventud aprendimos de Chiapas, Guerrero, Veracruz, Oaxaca.
Somos solidarias con quienes están al igual que nosotras siempre levantando la voz.
Vamos solas siempre porque no nos vendemos, no claudicamos y no olvidamos.
¡Ni un paso atrás por la libertad de los pueblos del mundo!
¡Ni un paso atrás por la organización barrial!
¡Ni un paso atrás para seguir exigiendo la libertad del pueblo Chiapaneco!
¡Ni un paso atrás por la libertad de expresión!
¡Ni un paso atrás para seguir levantando la voz por el pueblo palestino!
¡Ni perdón!
¡Ni olvido!