Sube en pandemia la trata de personas
Redacción
El tratante la obligó a dar servicios sexuales en un hotel.
No sabía ni leer, ni escribir, pero sabía bien el significado de una frase escrita a diario en su brazo: "270 cobro", el precio por el servicio sexual que el tratante que la explotaba había fijado y diario le pintaba.
Una joven, de 23 años de edad, originaria de Catemaco, Veracruz, se enamoró en esa entidad de un sujeto que la cortejó, le propuso matrimonio y la convenció de mudarse a la Ciudad de México.